Cartel de la concentración 'Quererla es crearla: Una escuela inclusiva para una sociedad inclusiva'. Día 23 de octubre de 2022 en la plaza del Callao de Madrid (España), a las 12:00 h.

Quererla es crearla: Una escuela inclusiva para una sociedad inclusiva

El domingo 23 de Octubre de 2022, Quererla es Crearla convocó una concentración en la plaza del Callao de Madrid (España) a las 12:00 h. para reivindicar un sistema educativo inclusivo que sea la antesala de una sociedad inclusiva. Una concentración por el cumplimiento de un derecho que beneficia a todas las personas.

El manifiesto de la Concentración tuvo más de 100 adhesiones de entidades y colectivos locales, regionales, nacionales e internacionales, y un nutrido grupo de personas se dieron cita en la calle para poner de manifiesto que queremos una Educación Inclusiva y vamos a apoyar a toda persona y colectivo que esté dispuesto a crearla, porque así avanzamos en nuestra humanidad, y porque este será el mejor legado para nuestros hijos e hijas, para las generaciones futuras y para ayudar a conseguir una vida en sociedad digna para toda persona, sostenible y que merezca la pena ser vivida.

Por el cumplimiento de un derecho que beneficia a todas las personas.

Cartel de la concentración 'Quererla es crearla: Una escuela inclusiva para una sociedad inclusiva'. Por el cumplimiento de un derecho que beneficia a todas las personas. Día 23 de octubre de 2022 en la plaza del Callao de Madrid (España), a las 12:00 h. Convoca, 'Quererla es crearla'.
Cartel de la concentración

La concentración en los medios

Fragmento de LaSexta Noticias Fin de Semana, conducido por Cristina Villanueva.

Audiodescripción [AD]: En la plaza de Callao, Madrid, se muestra la manifestación por una educación más inclusiva. Un numeroso grupo de personas de diferentes edades se concentra. En la cabecera, muchas personas sostienen una pancarta que dice: «Quererla es Crearla: una escuela para una sociedad inclusiva», «por el cumplimiento de un derecho que beneficia a todas las personas». Junto a ella, otra con el mensaje: «Necesitamos una educación inclusiva ya», «Familias por la inclusión educativa».

Diversas pancartas se hacen visibles entre la gente. Una persona lleva una pancarta con una foto de un joven y las palabras: «Por los rechazos, por los muros, por las miradas, por las burlas, por los derechos negados, hoy grito por inclusión». Al lado, otra pancarta más pequeña, de tela, sostenida por varias personas, que dice: «Si tú lo dices, será», «Basilisa Almendros». Belén Jurado, madre de Lucía, una joven autista, sostiene el libro «La Mirada de Ángel: Diario de la Madre de un niño con autismo», de María Luisa Fernández. Hay quienes llevan un broche de papel en la ropa que dice: «Quererla es crearla».

Otras pancartas visibles dicen: «Quiero que mi hermano aprenda feliz como yo», «Algún día regalarás plumas a todos aquellos que no creyeron en tus alas» de 'Revolta educativa', «Desde el Nalón a Callao, queremos y creamos», «Somos igual de diferentes» y «Con todos, como todos», de Comisión NEAE. Foanpas.

Fragmento de LaSexta Noticias Fin de Semana, conducido por Cristina Villanueva.

Audiodescripción [AD]: En la plaza de Callao, Madrid, se muestra la manifestación por una educación más inclusiva. En primer plano, Nacho Calderón, hablando a cámara.

Nacho Calderón - N.C.:— Soy Nacho Calderón, de Málaga, uno más en este movimiento. Reivindicamos que la escuela tiene que ser inclusiva, que no puede echar a nadie, y que todos los niños y todas las niñas tienen derecho a aprender y aprender a vivir juntos, y a estar juntos. Y eso es lo que estamos reivindicando: que las escuelas hagan las transformaciones que tengan que hacerse hasta que no haya ningún niño o ninguna niña que sobre en esas escuelas.

La realidad es que hay todavía muchos niños y muchas niñas que son expulsados de las escuelas, muchos otros que no son explícitamente expulsados, pero sí que lo pasan muy mal en ella, porque no se respetan sus ritmos, sus formas de vida, sus culturas… Y las escuelas tienen que cambiar. Están obligadas a cambiar.

La educación inclusiva es un derecho humano fundamental, reconocido por la ONU y reconocido también por nuestro país, por nuestro Estado, a través de la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, pero también a través de la propia LOMLOE, que dice que es un derecho del alumnado. Pero no se cumple, se vulnera. Y estamos aquí para decir alto y claro que eso tiene que cambiar. Que cumplan la ley, sí. Que cumplan la ley. Y que las cosas que ahora mismo están en contradicción con la Convención las cambien, de modo que no haya ningún niño ni ninguna niña que siga sufriendo en las escuelas o que sienta que ese no es su lugar.

Entrevistador (1):— ¿Algún tipo de medida extra?

N.C.:— Bueno, medidas extras en realidad son muchas. De este colectivo hay un montón de medidas, hay un montón de propuestas hechas que aparecen en la propia página web del colectivo, que muestran caminos que se pueden utilizar para hacer esas escuelas más inclusivas. Es cuestión de que en realidad queramos hacerlo, no es una cuestión de otra cosa. Es una cuestión de voluntad política y de voluntad de que la ciudadanía digamos: hasta aquí hemos llegado, y no continuemos dando espacio a escuelas que siguen siendo excluyentes.

Audiodescripción [AD]: En primer plano, Alejandro Calleja, hablando a cámara.

Alejandro Calleja - A.C.:— Hola, buenos días. Soy Alejandro Calleja. Cargo, en este movimiento, no tenemos ninguno: todos pertenecemos al movimiento «Quererla es crearla». Queremos y queremos crear una escuela realmente inclusiva para todos. Para todos en general, no solo para las personas denominadas con discapacidad o con diversidad funcional, porque al final la inclusión es un derecho de todos, en el que ganamos todos o perdemos todos como sociedad. Si queremos una sociedad inclusiva, tenemos que tener una educación inclusiva. Y nosotros ya, particularmente, llevamos ya muchos años de lucha.

Soy el padre de Rubén Calleja, un joven con síndrome de Down. Hemos llevado nuestra lucha ya tanto al Tribunal Constitucional como a Estrasburgo. Al final, nos dio la razón el Comité de Derechos Humanos de Personas con Discapacidad, emitiendo un dictamen en el cual exige a España que la educación inclusiva, como derecho humano, como derecho humano fundamental, sea real, efectivo y no se vulneren los derechos de las personas.

Porque estamos hablando de personas, no estamos hablando… Tienen los mismos derechos, la misma igualdad y la misma dignidad que todos.

Entrevistador (1):— O sea que le piden al gobierno que cumpla la ley, ¿no?

A.C.:— Lógicamente, porque el Estado en el año 2008 firmó la Convención Internacional de Derechos Humanos, y esa Convención y su Protocolo Facultativo son ley interna española y obliga al Estado a cumplir tanto la Convención como la Constitución española, y no la está cumpliendo. Todo lo contrario, el propio Comité ha hecho un dictamen, un informe, en el que dice que España, como país, como Estado parte, vulnera, viola, grave y sistemáticamente el derecho a la educación inclusiva de las personas con diversidad o discapacidad.

Entrevistadora (2):— Yo he llegado tarde y, por ello, le que le pregunto qué están reclamando aquí.

A.C.:— Estamos reclamando la efectividad. Es un derecho que está reconocido, reconocido tanto en la Constitución española como en la Convención de Derechos de Personas con Discapacidad y es un derecho constitucional. Es un derecho, un derecho humano, un derecho humano fundamental, para que sea realmente efectivo. No estamos hablando de cosas etéreas. No, en la educación inclusiva tenemos que estar todos juntos.

Yo tengo varios hijos, mi hijo con diversidad está con sus hermanos, sus hermanos con él, y en las escuelas es lo mismo. Y en la sociedad es lo mismo. Tenemos que estar todos juntos porque si no, no nos conocemos y, al final, si queremos una sociedad inclusiva, tendremos que empezar por una educación inclusiva real de calidad. No con la excusa de que faltan apoyos… No, es que es un derecho del alumnado, no es un favor que hace la administración. Porque el derecho es de los alumnos, no de los padres; es de los alumnos. Son los que realmente tienen derecho como personas a la educación y a la educación inclusiva.

Entrevistadora (2):— ¿Qué consecuencia conlleva que no se esté haciendo una educación inclusiva?

A.C.:— Pues al final, la LOMLOE, por desgracia, no contempla la inclusión como un derecho sino como un principio, y permite, a través de los dictámenes de escolarización, que sean apartados de la escuela ordinaria. Al ser apartados, al final no deja de ser una sentencia de muerte tanto educativa como social, porque expulsa a las personas de la escuela y de la sociedad.

Fragmento de LaSexta Noticias Fin de Semana, conducido por Cristina Villanueva.

Audiodescripción [AD]: En la plaza de Callao, Madrid, se muestra la manifestación por una educación más inclusiva. En primer plano, Susana Fajardo, hablando a cámara.

Susana Fajardo - S.F.:— Soy Susana Fajardo, soy miembro del movimiento ‘Quererla es crearla’ y además soy concejala de Educación del Ayuntamiento de Mérida, y estamos aquí para reivindicar mejoras en la educación que permitan a todos los niños y a todas las niñas educarse juntos. No solamente por los que están ahora mismo en las escuelas, sino por los que ya han pasado por la escuela y por los que van a venir, que es muy importante.

Entrevistador (1):— Comentaban que lo que queréis es que el Gobierno cumpla la ley.

S.F.:— Efectivamente. Tenemos que cumplir la ley. Ser conscientes de que esa ley existe, que ese compromiso con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad existe, está vigente y tenemos un compromiso por cumplirlo con todas las personas. Tenemos que ser conscientes de que el no cumplimiento de ese derecho lo que está generando es un daño en el alumnado. No solo en el alumnado discriminado, porque se pueda en un momento ser expulsado de la escuela, sino también el alumnado que deja de convivir.

Porque la igualdad de oportunidades no es únicamente un número determinado de recursos, que también es importante, estamos hablando de que somos quienes somos por la convivencia y por las personas con las que nos hemos relacionado. Y eso es una dificultad que se están encontrando muchos niños y niñas, la dificultad de relacionarse, que no se le está dando la importancia que creemos que tiene y que nos hace ser, como digo, quienes somos.

Entrevistador (1):— ¿Cuál es la realidad de este problema de España?

S.F.:— La realidad de este problema en España es que las legislaciones autonómicas… Ahora la LOMLOE reconoce como derecho el derecho a la educación inclusiva, pero se sigue estableciendo una serie de criterios por los que se sigue pudiendo segregar.

Las legislaciones autonómicas también lo amparan, pero además ya no es solamente el alumnado con cierta etiqueta que es expulsado, es que estamos hablando de chicos y chicas que no encuentran en la escuela una respuesta a otras necesidades que no tienen por qué hacer que se les expulse.

Estamos hablando del derecho de los niños y de las niñas, de los chicos y de las chicas, y estamos hablando de una mejora sustancial de lo que hoy conocemos como escuela ordinaria para que se convierta en una escuela para todo el alumnado, y estamos hablando, además, de evitar sufrimiento tanto en el alumnado como en las familias.

Entrevistador (1):— ¿Y además de cumplir ley?

S.F.:— Cumplir la ley daría lugar a tener que aplicar esas medidas. Estamos hablando que en muchísimas ocasiones centramos el discurso en la necesidad de recursos, que es cierto que hacen falta, pero también estamos hablando de mejorar la formación del profesorado, de que no sea una especialidad…

Estamos hablando de implantar las tutorías compartidas, o la docencia compartida, que el DUA (el Diseño Universal de Aprendizaje) tenga más presencia en las escuelas, que la formación del profesorado le permita abarcar todo eso de una forma adecuada y con los recursos adecuados…

Estamos hablando de un cambio de mirada total que además dará lugar, porque así lo tenemos que reivindicar, a una sociedad inclusiva.

Porque ten en cuenta una cosa: separados en la escuela, separados en la vida. Quiero decir que ese alumnado que se va no vuelve, y habitualmente, como te digo, la parte de las relaciones es muy importante, pero es que además ya seguimos separados en el tema del empleo, quien pueda trabajar…

No se trata de una cuestión únicamente de productividad. Se trata de una cuestión de dignidad y de derechos humanos.

Audiodescripción [AD]: En primer plano, Sesa Camean, hablando a cámara.

Sesa Camean - S.C.:— Soy Sesa Camean, presidenta de ‘Revolta Educativa’ y además soy madre de un hijo con enfermedad crónica compleja.

Entrevistador (1):— Cuéntanos qué reivindicas.

S.C.:— Reivindico una educación para todos y todas.

Entrevistador (1):— ¿Cuál es la realidad en España actualmente?

S.C.:— Pues que no se cumplen las leyes, y que incumplir la ley en este país sale gratuito.

Entrevistador (1):— Según la ONU, España incumple la ley, ¿verdad?

S.C.:— Sí. Lo que pasa es que España hace oídos sordos, y esto no se puede permitir más. Mi hijo lleva 20 años luchando para que tenga una educación de calidad, igual que el resto de las personas.

Entrevistador (1):— Al gobierno le reclaman, realmente, cumplir esa ley.

S.C.:— Le reclamamos que cumpla esa ley con carácter de urgencia y que no lo demore más. Tienen derecho a ser y estar. Que cumplan la ley, que la amplíen, y que doten a los centros educativos de recursos, todos los necesarios. Y que el recurso ha de ir al centro educativo, y que los niños no se segreguen.

Los niños son el futuro del mañana, son los ciudadanos del presente y del futuro, y se han de respetar.

Audiodescripción [AD]: En primer plano, Inés, hablando a cámara.

Inés:— Me llamo Inés, y vengo de Palma de Mallorca. Tengo una hija de 6 años con síndrome de Down y estoy en varias asociaciones inclusivas como

'APIES' (Asociación Pitiusa por la inclusión educativa y social), 'FARSEP' e 'Illes', de Baleares.

Entrevistador (1):— ¿Qué están reivindicando?

Inés:— Bueno, yo estoy reivindicando un derecho que beneficia a todos, que no es una moda sino un derecho en el que todos nos tenemos que implicar, que es la inclusión. Todos tenemos que estar juntos y se tienen que poner recursos.

Yo no estoy de acuerdo con que haya otras modalidades de educación que no sean la ordinaria, no estoy de acuerdo con la especial, ni con la combinada, ni con las aulas específicas, y creo que se tienen que poner apoyos y oportunidades para todos, empezando por el colegio y siguiendo por opciones después del cole.

En educación secundaria se tienen que poner apoyos para que la gente titule y no esté segregada. También en F.P. (Formación Profesional) y en la universidad.

Tenemos que estar todos juntos. No puede ser que cada uno aguante su vela y que la gente sufra y esté apartada.

Y si España ha ratificado estar en la ONU, y defender los derechos de las personas con discapacidad, pues que cumpla. Que cumpla de una vez por todas. Porque se sufre mucho y no hay derecho.

Entrevistador (1):— ¿Cuál es la realidad que hay en España?

Inés:— Pues yo creo que queda muchísimo que hacer. Es verdad que se avanza, y que cada vez van saliendo más casos de inclusión, pero queda mucho por hacer.

Y mira, con el tema de la pandemia, en dos días las personas estaban teletrabajando, a las empresas no les quedó más remedio, y la inclusión tiene que ir más rápido, no tiene que ser: «Bueno, algún día… Bueno, ya veremos…»

No, son derechos de personas con diversidad, con discapacidad, que benefician a todo el mundo. No puede ser que se vea y se normalice que a las personas se les aparte. Esto no puede ser.

Creo que en España se están dando pasos adelante, porque es verdad, y porque cada vez vemos a más profesionales implicados, pero falta mucho por hacer. Por ejemplo, en Portugal no hay escuela especial y nosotros tenemos que copiar buenas prácticas y seguir adelante. Porque es obligación de todos y un beneficio que también enriquece y ayuda a todos. Porque nunca se sabe. O sea, en dos días nos cambia la vida y nadie tiene que estar apartado.

Entrevistador:— Al Gobierno le piden que cumpla la ley y copie el modelo de otros países, ¿no?

Inés:— Sí, que aprendamos todos de las buenas prácticas. Seguro que aquí en España también podemos aportar, por supuesto, y hay muchas personas que quieren y ayudan. Aquí estamos muchas personas de diferentes partes de España, pero falta, falta mucho por hacer.

Los políticos que están ahí arriba, tienen que hacer que con la ley se cumplan estos derechos. Que se pongan apoyos, y se dé formación, que haya sensibilización, y que se apoyen recursos en los colegios… Y que todos nos impliquemos.

Fragmento de LaSexta Noticias Fin de Semana, conducido por Cristina Villanueva.

Audiodescripción [AD]: En la plaza de Callao, Madrid, se muestra la manifestación por una educación más inclusiva. Un numeroso grupo de personas de diferentes edades se concentra. En la cabecera, muchas personas sostienen una pancarta que dice: «Quererla es Crearla: una escuela para una sociedad inclusiva», «por el cumplimiento de un derecho que beneficia a todas las personas». Junto a ella, otra con el mensaje: «Necesitamos una educación inclusiva ya», «Familias por la inclusión educativa».

Diversas pancartas se hacen visibles entre la gente. Una persona lleva una pancarta con una foto de un joven y las palabras: «Por los rechazos, por los muros, por las miradas, por las burlas, por los derechos negados, hoy grito por inclusión». Al lado, otra pancarta más pequeña, de tela, sostenida por varias personas, que dice: «Si tú lo dices, será», «Basilisa Almendros». Belén Jurado, madre de Lucía, una joven autista, sostiene el libro «La Mirada de Ángel: Diario de la Madre de un niño con autismo», de María Luisa Fernández. Hay quienes llevan un broche de papel en la ropa que dice: «Quererla es crearla».

Otras pancartas visibles dicen: «Quiero que mi hermano aprenda feliz como yo», «Algún día regalarás plumas a todos aquellos que no creyeron en tus alas» de 'Revolta educativa', «Desde el Nalón a Callao, queremos y creamos», «Somos igual de diferentes» y «Con todos, como todos», de Comisión NEAE. Foanpas.

Manifiesto

Quererla es crearla: Una escuela para una sociedad inclusiva

Las personas y colectivos que promovemos esta iniciativa creemos firmemente en la necesidad de transformar y mejorar el sistema educativo español desde una perspectiva inclusiva, con el convencimiento de que, de esta forma, contribuimos al desarrollo de una sociedad con mayor equidad, más justa y, por lo tanto, más democrática.

Compartimos el principio moral básico de considerar que todos los seres humanos son iguales en dignidad y derechos, independiente de las características diferenciales en cuestiones de género, capacidad, creencias, estrato social o cualquier otra y que estas características constituyen la riqueza de la diversidad humana a través de la que configuramos sociedades plurales.

Afirmamos que este convencimiento en favor de una educación inclusiva se fundamenta en un dilatado corpus de normas, convenciones y tratados internacionales que, en materia de derechos humanos, configura un Código Internacional de los Derechos Humanos, que da legitimidad y respaldo jurídico a las aspiraciones que nos movilizan para conseguir progresos más profundos y sostenidos en materia de educación inclusiva.

Recordamos que la Constitución Española, conforme a su artículo 96.1, obliga a que los tratados internacionales que España ratifique en materia de derechos humanos, pasen a formar parte de su ordenamiento jurídico y que, por ello, y por su naturaleza de normas de rango superior, obligan a que las de rango inferior (Leyes, reglamentos u otras disposiciones), deban acomodarse a lo que en dichos tratados se establezca.

Sabemos, además, que el Sistema de Naciones Unidas ha establecido como uno de los principales Objetivos para el Desarrollo Sostenible, en el marco de la Agenda 2030 (ODS 4), el compromiso ineludible para todos los estados de avanzar, sin demora, hacia el desarrollo de sistemas educativos de calidad guiados por la equidad y la inclusión.

Somos conscientes de que esta ambición educativa y social supone necesariamente una transformación profunda y sistémica de los sistemas educativos vigentes, a través de un proceso que debe hacerse sostenible en el tiempo, y que requerirá de determinación, voluntad y recursos efectivos, pero que no puede dilatarse, porque la vida escolar y el futuro de muchas niñas y niños que hoy viven ya situaciones de exclusión está en juego, y no acepta demoras.

Nos apoyamos en un amplísimo corpus de conocimientos e investigación en este ámbito, realizadas con el más alto nivel y rigor, que han puesto de manifiesto que no solo es justo y necesario sino posible y factible el desarrollo de culturas, políticas y prácticas escolares inclusivas, y nos oponemos a que todo ello quede ensombrecido por falsas creencias, mitos, malentendidos, bulos y mentiras.

Exigimos una planificación coherente a corto, medio y largo plazo, acompañada de una inversión sostenida y suficiente para generar las capacidades adecuadas en el sistema y en los docentes de todas las etapas educativas. Esta planificación e inversión permitirá crear y construir culturas, políticas y prácticas escolares que encarnen los valores de igualdad, respeto a la diversidad y desarrollo de la libertad, de forma que todo el alumnado, sin eufemismos, pueda compartir un espacio común de aprendizaje y participación social, donde sentirse parte y formar parte del grupo de niños y niñas de sus barrios, pueblos o entornos, que se aceptan y reconocen por quienes son.

Actuamos como ciudadanas y ciudadanos libres y responsables, sin ataduras a intereses económicos o de ningún otro tipo, salvo el interés superior de la infancia y el cumplimiento de los derechos que todos los niños y niñas tienen reconocidos.

Tenemos el convencimiento de que nos asiste la razón, la legalidad, y la ética que se preocupa por el cuidado, la vida plena y el bienestar de todos y todas, y aquí declaramos:

Queremos una Educación Inclusiva y vamos a apoyar a toda persona y colectivo que esté dispuesto a crearla, porque así avanzamos en nuestra humanidad, y porque este será el mejor legado para nuestros hijos e hijas, para las generaciones futuras y para ayudar a conseguir una vida en sociedad digna para toda persona, sostenible y que merezca la pena ser vivida.

Adhesiones